PROSA REBELDE Y ANTISISTEMA

Es un blog dedicado a la poesia diferente al verbo sangrante que en llamas revela el interior humano. Es un verbo rebelde y combativo lleno de odio y de amor de dolor y de grandeza. Es la contraposicion del ser. Es poesia del asfalto para el asalto. Asaltamos el mundo con unas palabras y como estandarte un sueño. Para el imperio solar y la revolucion espiritual. Poesia del asfalto para el asalto.,,

miércoles, 8 de octubre de 2008

Daniel Osvaldo Gonzalez Muerto Por La Patria





-El día 5 de octubre es el día de las Victimas del Terrorismo, bueno en homenaje a un Soldado asesinado por la Bestia Roja este poema.


El Soldado Daniel O. Gonzáles prestaba servicio en el Regimiento de Caballería de Tiradores Blindados con asiento en la Ciudad de Azul. Dicha Unidad fue atacada la noche del 19 de Enero de 1974 por elementos de la Subversión apartida del ERP.
El mencionado soldado se hallaba apostado como centinela en el puesto del Polígono de tiro. Por ese lugar penetro el grueso de la fuerza subversiva, con el propósito de tomar la plaza y el Soldado Gonzáles fue la primera baja de nuestro ejército.
Luego de la sorpresa se generalizo el combate. El contraataque estuvo a cargo de Oficiales de la Unidad que respondieron desde el Casino y desde los altos del tanque de agua y parapetados en un vehículo blindado.
Los rojos ingresaron en tres camiones, de los cuales dos fueron destruidos y el restante se retiro. La Patria debió lamentar, también, la muerte del Coronel Arturo Gay, la ejecución de su señora esposa delante de sus hijos y el secuestro del Teniente Coronel Jorge R. Ibarzabal, que terminaría con la muerte de este meses mas tarde.
Los subversivos abandonaron tres muertos y un herido.

DANIEL OSVALDO GONZALES MUERTO POR LA PATRIA

Voy al cuartel, les dijo
y no sabía
que se iba, si
pero que no volvería.

Camino del puesto recordó
su astucia juvenil
para la vida,
cien veces la hora
calculo,
para encontrar a esa mujer
a la salida.

Debajo de su casco
Dios
lo predispuso
para dejar su cuerpo de soldado
entre la lluvia,
después de sentirse algo confuso.
Un rayo, nada más.
Y el alma sube, sube, se ventila
llevando como un fuego
el nombre de Daniel,
dejando
cargada de sangre
a su mochila.

La Gloria lo espero con un saludo.
No todos pueden llegar
entre banderas,
pero el, el Hùsar, pudo.




Gabriel Ruiz de los Llanos








¡DANIEL OSVALDO GONZALES!


¡PRESENTE!

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